Todos los años me encuentro con el mismo dilema, ¿qué se le regala a una persona a la que no le gusta la lectura, no tiene un gusto concreto de música, no tiene aficiones y lo único que sabes que le gusta es el chocolate? Pues eso... se le regala CHOCOLATE. La única forma de sorprender a esa persona es buscar una manera diferente y divertida de regalárselo. Así que este año lo hice de la siguiente manera
No hay comentarios:
Publicar un comentario